Así como ocurrió hace poco menos de un mes, las intensas precipitaciones caídas entre el martes y jueves pasados hicieron que el río se desbordara y se saliera de su cauce.
Si bien las lluvias del martes fueron intensas, no llegaron a provocar una inundación, pero hicieron que se comenzara a mirar con desconfianza hacia el sector ribereño. Finalmente, los entre 76 y 85 mm de lluvia caídos entre el día de ayer y la madrugada de hoy hicieron que el río se desbordara. En el pico de la crecida, alcanzado en horas de la tarde, el río llegó a salir del ingreso al balneario municipal, anegando la plaza del Balneario, zona del camping municipal, Club Náutico y predio del Viejo Molino.
Por tal motivo, desde Bomberos Voluntarios, la Municipalidad y Defensa Civil se trabajó en la evacuación de familias, en su gran mayoría de manera preventiva y algunas ya con el agua en su vivienda, en la zona de quinchos y en un sector de Avenida Lavalle.
Según información brindada por el coordinador de Defensa Civil y Presidente del Concejo Deliberante, Francisco «Paqui» Bóveda, corroborada por Bomberos Voluntarios, hasta el jueves a la tarde se evacuaron 14 familias que fueron alojadas en el gimnasio de la Escuela Nacional, y 1 familia que se encuentra en el centro de evacuados que funciona en el gimnasio de la Escuela 5 en Barrio Palermo. Son un total de 78 personas (40 mayores de edad y 38 menores). A esta suma hay que agregarle los autoevacuados, cuya cantidad no fue suministrada.
También se informó que se realizó una asistencia médica, controlando a las personas, especialmente aquellas que requieren una medicación. Asimismo, se entregaron alimentos a los evacuados.
De acuerdo a las estimaciones oficiales y el monitoreo del nivel del río, la creciente se ha estabilizado en 1 ó 2 centímetros por hora, y se espera que en horas de la noche comience a bajar.