El doctor Mario Alonso Puig, destacado cirujano e investigador de la inteligencia humana, señala que estar un minuto rumiando un pensamiento negativo deja al sistema inmunitario en un estado de vulnerabilidad durante seis… horas. ¡Tremenda relación! ¡Por sólo un minuto “enganchados” en un pensamiento negativo nuestro cuerpo queda sufriendo durante las siguientes 6 horas! Mal negocio ¿no es cierto?
Entonces, qué importante y necesario es aprender a controlar nuestros pensamientos. Los pensamientos resultan del trabajo de nuestra mente, pero a su vez, también la alimentan y determinan cómo seguirá trabajando.
Se ha dicho que nueve de cada diez enfermedades tienen su origen en la mente.La ciencia hoy lo está confirmando por medio de estudios como los que cita el Dr. Alonso Puig. Y es muy significativo que la especialidad médica de este investigador sea el aparato digestivo: una de las partes de nuestra anatomía que más expresa (o “delata”) nuestros estados mentales. Las afecciones gastrointestinales normalmente tienen relación directa con la falta de tranquilidad y de paz mental.
Un antiguo refrán dice: “No puedes evitar que los pájaros revoloteen sobre tu cabeza, pero sí que hagan nido en ella”. Los malos pensamientos son parte de nuestra naturaleza, nuestra mente tiende a ir en esa dirección casi automáticamente. Cuando las cosas están difíciles o no funcionan como esperábamos, cuando nos tratan mal, cuando estamos cansados, cuando atravesamos un conflicto… y en tantas otras situaciones difíciles, es normal que nuestra mente sufra y se manifiesten entonces pensamientos negativos. Pero el gran punto es qué hacemos con esos pensamientos. ¿Dejamos simplemente, inconscientemente, que se queden a hacer nido en nuestra mente?
Te animo a que comiences a tomar conciencia de tus estados mentales negativos, este el primer paso para evitar que se queden a “hacer nido”. ¿Cómo? Comenzá a observar con mayor atención lo que se cruza por tu mente, especialmente cuando te sentís mal. Hacete preguntas para identificar qué tipo de pensamiento es el que está revoloteando sobre tu mente cuando te sentís mal: ¿es un pensamiento de enojo?, ¿de impotencia?, ¿de bronca?, ¿de culpa?, ¿de frustración?… (por ahora, te propongo identificar los pensamientos tóxicos de esta manera, más adelante descubriremos otras características de tales pensamientos). Entonces hay que aprender a enfrentar ese pensamiento y decirle ¡basta!, porque continuar “enganchado” es un muy mal negocio.
En próximas ediciones de este espacio vamos a compartir algunas herramientas que espero puedan serte de ayuda para aprender a “pensar bien para sentirnos mejor”.
Lic. Rodrigo Arias
Licenciado en Teología y en Psicología.
Conductor del programa radial y televisivo Una Luz en el Camino