El comienzo de la tercera fecha del Torneo de Primera debió postergarse casi una hora debido a la ausencia de los árbitros.
Un verdadero papelon es el que se vivió ayer en el Estadio Municipal “Pablo Zabaleta” cuando debía arrancar la tercera fecha del Torneo de Primera División. Todo estaba dispuesto para comenzar con normalidad, a excepción de un detalle no menor: la terna arbitral que debía jugar el partido no estaba.
Así es, los árbitros brillaban por su ausencia. Por razones que se desconocen, los integrantes de la UDA no aparecieron ¿Desprolijidad administrativa? ¿Razones de otra índole? Las especulaciones sobraban. Mientras, los esfuerzos de los directivos por ubicar a una terna arbitral que se haga presente eran en vano. Incluso se barajó con seriedad suspender el partido entre Millonario y Palermo, y hasta toda la jornada. Esto perjudicaba a los clubes, que corrieron con los gastos de la apertura de la cancha y hasta de efectivos policiales. Papelon mayúsculo para una liga que, si bien no deja de ser amateur, intenta hacer las cosas de la manera más seria y prolija posible.
Recién una larga media hora después 3 árbitros de la UDA se hicieron presentes en el Estadio Municipal. Párrafo aparte, no serían todos los que estaban designados para el partido, pero a esa altura poco importaba.
Entonces si, con 45 minutos de retraso y con relativa normalidad pudo jugarse la fecha tal y como se había programado.
En primer término jugaron Millonario contra Palermo. Con un golazo de Leonardo “Petaca” Burgos, el Millonario se impuso 1-0.
Por último, se enfrentaron Obras Sanitarias contra Almirante Brown. El azulgrana se impuso 2-0. Los goles los convirtieron Dylan Barrientos en contra de su valla tras un córner en la primera etapa y Jerónima Miranda en el complemento.
Así termino la primera parte de una fecha que seguramente tendrá repercusiones en la semana.
