Un operativo de control vehicular realizado por la Dirección de Tránsito en el centro de nuestra ciudad terminó con la retención de una moto, luego de que su conductor se negara a hacerse la prueba de alcoholemia, se tornara agresivo e incumpliera varias normas viales.
El episodio se registró el pasado martes a las 19:30 horas en la esquina de Avenida Merlassino y Vicente López y Planes, donde los inspectores de Tránsito realizaban tareas de ordenamiento de la circulación.
Los agentes notaron que un motociclista, a bordo de una Honda Tornado 250 de color rojo, venía circulando de manera imprudente y haciendo maniobras peligrosas que ponían en riesgo tanto su vida como la de terceros.
Al detener la marcha y pedirle que se sometiera al control de alcoholemia, el vecino de nuestra ciudad se negó rotundamente. La situación empeoró cuando, al pedirle la documentación, se constató que su licencia de conducir estaba vencida y que, además, no pudo mostrar ningún otro papel que acreditara la moto.
Dado el cúmulo de infracciones y el hecho de que el conductor se puso a insultar a los inspectores, se tomó la decisión de retener el rodado.
Tanto el acta de infracción como el registro de las faltas cometidas fueron girados al Juzgado de Faltas Municipal, que será el encargado de determinar la sanción correspondiente.
