Según informó el semanario pergaminense El Tiempo, «El Ministerio de Infraestructura de la provincia de Buenos Aires pre adjudicó la obra de la represa de contención de excesos hídricos aguas arriba del Arroyo Pergamino.
Según trascendió el sábado desde la Secretaría de Asuntos Hídricos, a cargo de Luis Giménez, habrían informado en forma telefónica a los funcionarios del Gabinete del intendente de la vecina localidad, Javier Martínez.
Tal como surge de esta comunicación el viernes se decidió la pre factibilidad, que es el paso previo a la firma del contrato.
De esta manera la provincia de Buenos Aires le informa al organismo financiador, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que para la administración bonaerense la empresa seleccionada sería la indicada para desarrollar la obra.
La firma seleccionada para desarrollar el proyecto no ha trascendido porque todavía falta que el BID lo ratifique.
Calculan que ese trámite puede durar diez días y al término de ese período estarían en condiciones para rubricar el contrato.
La obra consiste en una presa de materiales sueltos, de embalse no permanente, ubicada aproximadamente a 3,5 km aguas arriba de la ciudad, regulando los caudales provenientes de los arroyos Pergamino y Botija. Con una longitud de 6500m y una altura máxima de 16m desde la fundación, su función es asegurar que los niveles del arroyo permitan el funcionamiento eficiente de la red urbana de desagües pluviales aun cuando se produzcan lluvias de importancia en las cuencas. La licitación incluye también el alteo de la RN N° 178 de unos 2800 metros de longitud.
La obra considerada prioritaria dentro del proyecto hidráulico para mitigar las inundaciones en el casco urbano pergaminense, es un trabajo estructural de gran envergadura.
En relación al funcionamiento de la presa, expertos en el tema explicaron que la misma “va a producir una regulación de las crecidas. Va a embalsar el agua y largarla en menor proporción de la que llega y entonces se va a ver beneficiada la ciudad de Pergamino y todo lo que se encuentre aguas abajo, es un efecto colateral positivo”, pero aclararon que “la presa sola no es la solución a toda la cuenca de Arrecifes, la cual requiere de otras medidas estructurales. Tanto la presa como todos los desagües pluviales que se hagan en la ciudad no constituyen una solución total y absoluta al problema de las inundaciones, sino que va a mitigar y reducir la frecuencia, pero no va a eliminar el riesgo porque la vulnerabilidad de la ciudad está dada en el hecho de que se ha ocupado el valle de inundación y eso no se puede cambiar”.
Por último se indicó que se trata de “un problema con una solución de mitigación. Hay que mezclar obras estructurales como lo es la presa, y un sistema de alerta temprana, más un plan de actualización del uso del suelo para no seguir ocupando zonas inundables. Es decir un combo de soluciones que deben adoptarse en conjunto”.
Fuente: Semanario El Tiempo (Pergamino)