Hoy cumple 100 años de vida institucional el Club Atlético Huracán de Arrecifes.
El nombre Huracán, el 21 de marzo de 1919, a las 22:30 hs, se debió a la moción del Sr Ciriaco Mucci considerando, segun reza el acta fundacional de la institución, que iba a ser «una divisa de fuerza, impetuosa y temible». Precisamente, el lugar de fundación fue en el domicilio particular del mencionado Mucci, en la actual calle Stegmann 495, casi Francia. Alli nació Huracán, que de paso también quedó registrado el distintivo que conmemora el globo aerostático que por primera vez fue piloteado por Jorge Newbery.
Entre otros cofundadores se encontraban los señores Félix Fernández, Eduardo Fragelli, Evaristo García y quien por unanimidad fue elegido el primer presidente en la historia del globo: Américo Acevedo.
Varias sedes provisorias tuvo el Globito en su larga y fecunda vida: en calle Irlanda, entre Remedios de Escalada y Blas Parera; en calle Santiago H. Pérez, entre San Martín y Av Molina. Luego, ocupó varios años en alquiler un local en Lamadrid 41, al lado del Cine Español y la actual sede propia, ubicada en calle Corrientes y adquirida en 1989, bajo la presidencia de Hugo «Piojo» Rodríguez.
Acaso fría y descarnada así se produjo, hace nada más y nada menos que 100 años, la fundación del Club Huracán.
A lo largo de su historia, el fútbol fue la actividad más importante del Club Huracán, siendo un auténtico semillero de cracks que regaron su fútbol en las canchas de Arrecifes, la zona, la provincia y el país. Quizás el que más trascendencia obtuvo fue el de Julio César Saldaña, quien tras surgir de las divisiones inferiores de Huracán pasó a Newell´s Old Boys, convirtiéndose en un verdadero emblema de la entidad rosarina, llegando a vestir las camisetas de Boca Juniors y de la Selección Argentina.
A nivel local, el Globito obtuvo 10 títulos, en las temporadas 1931; 1933; 1957; 1962; 1963; 1966; 1968; 1969; 1989 y 1990. Sólo lo superan en cantidad de títulos Almirante Brown (20); Deportivo Palermo y Obras Sanitarias (12).
Colaboración: Hugo A. Laguna